—¡Hmm! Si no fuera por las acciones de alguien, ese grupo de bandidos no habrían intentado aniquilarnos.
—Los dos son discípulos de la Secta Espada de las Siete Estrellas, pero ¿por qué son tan distintos? Algunas personas nacen sin habilidad, pero les gusta la atención... Si no fuera que el Anciano Feng Ping lastimó el cultivo del líder de los bandidos, ¿se hubiera atrevido a atacarlo?
—Por suerte, ninguno de nuestros hermanos ha muerto, de lo contrario... ¡Hmm!
...
El grupo de guardias conversaba acaloradamente y sus diálogos parecían todas apuntar a lo mismo.
El rostro de Zhao Lei mostró su contrariedad porque, por supuesto, sabía que los guardias hablaban de él.
—Duan Ling Tian, ¿de veras estás en el cuarto nivel de la Etapa de Alma Naciente? —desde el otro lado, una transmisión de voz llegó a oídos de Duan Ling Tian otra vez.