Tras despedirse de Zheng Fan y Zheng Song, Duan Ling Tian abandonó el Salón Mizar, un poco alterado. El patrocinador de Zhao Lin le había hecho sentirse asustado. No obstante, poco después pareció haber pensado en algo y suspiró aliviado.
—¿Por qué estoy pensando tanto? Mientras Zhao Lin no venga a provocarme, no pasará nada, pero si causa problemas, entonces yo no me dejaré ofender tan fácilmente —se dijo.
Un haz de gélida luz atravesó los ojos de Duan Ling Tian. Para aquel entonces, su Fuerza Espiritual había evolucionado hasta el punto de quiebre entre la Etapa del Alma Naciente y la Etapa de Curiosidad de Vacío, ¡y estaba a un solo paso de avanzar su Fuerza Espiritual a la Etapa de Curiosidad de Vacío!