— ¿Qué es imposible?
Duan Ling Tian no pudo evitar sonreír cuando escuchó las palabras de Zuo Yue.
— Admitiste que todo era solo tu especulación… Si realmente lograras adivinar todo bien, no serías la basura que eres ahora.
— ¡Basura!
La expresión de Zuo Yue se puso fea cuando escuchó las palabras de Duan Ling Tian. Él realmente no sabía cómo responder. Aunque no estaba dispuesto, tuvo que admitir que era como un pedazo de basura en comparación con Duan Ling Tian.
Se podía ver en los labios de Duan Ling Tian que estaba contento cuando vio la expresión de Zuo Yue. Estaba dispuesto a tomar el juramento de la Novena y Nueve Tribulaciones Celestes y arriesgarse a enfrentar la pena de trueno incluso si eso significaba la muerte para negar el hecho de que había obtenido los tres Fragmentos de Profundidad del cuerpo del Emperador Marcial Qing Feng.
