«¿Una espada medio rota? ¿E incluso está oxidada?»
Todos se quedaron atónitos cuando vieron la espada. Los guerreros normalmente usaban armas de grado superior, que estaban hechas de todo tipo de metales divinos y eran refinadas por maestros. Aunque esas armas podían romperse y perder gran parte de su espiritualidad, nunca se oxidaban, incluso si estaban enterradas bajo tierra por miles de años.
El material que de la espada oxidada probablemente no era impresionante, pero, ¿podría seguir llamándose espada?
Tianya Haoyue había subido la guardia cuando escuchó a Yi Yun decir esas palabras, pero nunca imaginó que sacaría una espada rota.
—¿Vas atravesar mi armadura con ese trozo de basura? —preguntó Tianya Haoyue entretenido.
—Lo sabrás cuando te ataque.
Justo cuando la voz de Yi Yun se desvaneció, ¡blandió la espada rota en su mano en dirección a Tianya Haoyue!