Yi Yun dijo:
—Gracias por el consejo, instructor Qin. Entiendo sus buenas intenciones.
Por muy perfectas que sean las personas, siempre aparecerá alguien mejor. Apenas había insertado una sola Flecha Fundamental, pero un joven genio de una familia solitaria había insertado siete.
La brecha era evidente.
Los párpados del calvo Qin continuaban abiertos de par en par.
—¿Puedes decirme tu razón?
Sentía que el hecho de que Yi Yun se mantuviera fiel a sus creencias significaba que tenía que tener algún motivo, o de lo contrario sería demasiado difícil de entender.
Yi Yun dijo:
—No hay ninguna razón especial. En el pasado, yo recogía hierbas todos los días para ganarme la vida cuando estaba en el Desierto de las Nubes. Tan pronto aprendí a caminar, comencé a recoger hierbas. Así que, después de todos estos años, he acumulado mucha experiencia en la recolección. Además, tengo algo de talento para hacerlo, así que creo que lo haré bien.
