Al ver cómo Shi Ping y Shi Fei le estaban haciendo las cosas difíciles a Yi Yun y compañía, Shui Ningshuang frunció un poco el ceño. Había seguido al Señor Lluvia Oportuna durante mucho tiempo, así que era consciente del recelo que existía entre él y la Secta Lluvia Inmortal. Por lo tanto, ella tampoco tenía una buena impresión de la secta.
—Señor Divino, ¿por qué aceptó la sugerencia del viejo Changsheng? Claramente tiene la intención de usar esta oportunidad para demostrar el poder de su secta. Ha actuado completamente de acuerdo a sus deseos. —le transmitió Shui Ningshuang al Señor Lluvia Oportuna.
