Cuando la conciencia de Yi Yun se conectó a la antigua Piedra de Dios Fey, sintió que todo a su alrededor se desvaneció. Las élites que meditaban alrededor de las piedras, así como la espesa niebla del Caos habían desaparecido.
Yi Yun llegó a un mundo completamente desconocido.
Dondequiera que miraba veía las profundidades del universo. Bajo sus pies había galaxias en espiral brillantes de una belleza impresionante.
Frente a él estaban los Orígenes del Cristal Púrpura con una brillante luz púrpura. Estaba suspendido en el vacío y giraba lentamente.
Después de llegar a ese mundo alternativo, había observado el Cristal Púrpura incrustado en su corazón incontables veces, pero siempre había sido misterioso y claro. Parecía ser transparente, pero Yi Yun no tenía idea de los complejos misterios que guardaba.
Pero ahora, el Cristal Púrpura que veía era completamente diferente…