La distancia entre el mundo Tian Yuan y los Doce Cielos Empíreos iba más allá de la imaginación. Si uno volaba directamente hacia allí, ni siquiera dos o tres millones de años serían suficientes para llegar.
A través de los nodos espaciales, lugares distantes podían conectarse por canales espaciales. Gracias a ello, la distancia se reducía unas cien mil veces. Aun así, viajar volando tomaba un largo periodo de tiempo.
En la turbulencia espacial, Yi Yun y Lin Xintong no podían depender constantemente de la Torre Adviento de Dios, a pesar que la tenían.
Eso se debía a que en el momento en que la invocaban, su gran tamaño le hacía experimentar impactos aún mayores de las tormentas espaciales en la turbulencia. Eso causaría que la energía de la matrices de la torre se agotaran rápidamente.
Además, en las tormentas, tratar de recargar la energía de las matrices no sería fácil.