A pesar de haberse reencontrado después de una década, Yi Yun y Jiang Xiaorou no tuvieron tiempo para recordar el pasado. Aún estaban en la Tumba del Alma y enfrentando a la hostil Luna de Sangre. Con tantos espectros Yin a punto de despertar, necesitaban dirigirse inmediatamente a la tierra en donde hibernaban y destruir todo lo que había allí.
Había capa tras capa de defensas que protegían a la Tumba del Alma, lo que la hacía extremadamente segura.
La gran matriz afuera de ella aislaba el interior del mundo exterior. En la tierra de letargo de los espectros Yin había laberintos espaciales y numerosas matrices de ilusión ocultas en ellos. Hasta la entrada a la tierra de letargo cambiaba con frecuencia. Incluso con los recuerdos del hombre enmascarado, les llevaría mucho tiempo determinar la ubicación exacta de ese lugar.
