Matar a un humano era una tarea difícil para el Ginseng del Cielo Púrpura Yang.
Las hierbas espirituales eran diferentes de las bestias desoladas, ya que tenían deficiencias innatas.
Mientras una hierba se cultivase para alcanzar el nivel primordial o inmortal, no podía escapar de su destino de ser recogida o capturada a pesar de su larga vida útil.
Algunas hierbas primordiales incluso eran inferiores al Ginseng del Cielo Púrpura Yang. Incluso siendo hierbas primordiales, no tenían la capacidad de escapar a través del agua o la tierra, simplemente estaban en su lugar esperando ser recogidas por los humanos o comidas por las bestias desoladas.
Tales especies de hierbas tenían pocas posibilidades de convertirse en una hierba primordial.
A menos que esas hierbas crecieran en lugares realmente ocultos y nunca fueran encontradas por humanos, solo entonces alcanzarían los diez mil años necesarios para absorber la esencia del Cielo y la Tierra.
