—¿Incluso los soldados comunes sienten que se avecina la sombra de la guerra? —Leylin asintió inexpresivo mientras reflexionaba sobre el tema en su mente. No permaneció en las barracas cuando regresaron, sino que volvió a la propiedad que había comprado.
Finalicé otra misión. Los puntos de contribución que gané deberían ser suficientes para que pueda comprar esa información, ¿verdad?Pensó Leylin.
No se podía acceder a la base de datos para Brujos en Luna Plateada únicamente con dinero. Había requisitos específicos para obtener cosas y se necesitaban puntos de contribución para acceder a la información de alto grado sobre los hechizos. Ese era uno de los motivos por los que Leylin había ingresado a la guardia de la ciudad.
Al pensar en eso, no pudo evitar echar un vistazo a sus estadísticas.