Mirando a Bicky en sus brazos, Leylin tenía una expresión complicada.
Respecto al hecho de que ella se lanzó sobre él la noche anterior, Leylin supuso que había algunas razones detrás de esto. La primera es que Bicky tenía una impresión favorable de él. Como no tenía el corazón para verlo ser derrotado, vino hasta aquí para consolarlo. La segunda era que las prácticas de este mundo eran generalmente más abiertas, y Bicky no era virgen antes de que lo hiciera con él, obviamente había tenido relaciones sexuales antes. Finalmente, debido al baño de sangre que se estaba acercando, estaba mentalmente intranquila, por lo que su mente subconsciente tomó la decisión de realizar algunas actividades estimulantes y, por lo tanto, desahogar su frustración.
Sin embargo, sin importar cuáles fueran las razones, Bicky era una belleza, y Leylin no tenía las de perder.
—¿¡Ah!? —de repente, el cuerpo femenino que estaba sobre Leylin, se sacudió y se incorporó.
