Devorar, masacre, codicia y muerte... Varias leyes poderosas convergieron en el cuerpo de Leylin, causando que creciera sin fin. El camino para convertirse en un Mago de rango 8 era el control de varias leyes, y con tres nuevas leyes agregadas, Leylin avanzó rápidamente desde la cima del rango 7.
Todo encajó en su lugar. Incluso solo una ley de la muerte o de la masacre hubiera podido haberlo llevado al rango 8, pero con cuatro leyes diferentes condensándose juntas, él avanzó a un reino completamente diferente.
Un aterrador fantasma Targaryen apareció detrás de su espalda, silbando como un antiguo gobernante de las bestias. Su cuerpo custodiado por finas escamas carmesí, cubría los cielos, y agitaba sus alas diabólicas, mientras su único cuerno irradiaba terror. Lo más intrigante de todo era su tercer ojo, la pupila que tenía en su interior era tan grande como una estrella que contenía un rastro de indiferencia a sangre fría.