Al oír esos dos números, Linley realizó algunos cálculos mentales. Su corazón no pudo evitar temblar.
¡Una circunferencia de mil millones de kilómetros significaba qué, en tamaño, era más de un billón de veces el área con una circunferencia de mil kilómetros! Incluso las diez ciudades combinadas, en términos de tamaño, ¡eran sólo cien billonésimos del tamaño total de la Prefectura Resplandor de la Noche! ¡Cien billonésimos! Ese contraste era simplemente demasiado impactante.
—¡Sólo las élites del Reino Infernal deberían poder establecerse en Ciudad Ala Real! —se dijo a sí mismo.
El joven de cabello de jade, Daebra, suspiró.
—Si en mi vida, soy capaz de ser un ciudadano de Ciudad Ala Real, me sentiría satisfecho. Por desgracia, es demasiado difícil.
Daebra no tenía suficiente confianza en sí mismo.
Ser ciudadano de una ciudad en el Reino Infernal era algo digno de orgullo.
