Los Santos que habían estado manteniendo el orden, inmediatamente se retiraron a las orillas del río. En cuanto al cada vez mayor número de observadores, todos ellos miraron con los ojos muy abiertos en estado de shock. En ese momento, la repentina muerte de Bloom ya había causado una gran conmoción a esos comuneros. Debido a que ellos habían visto a Bloom volar en el cielo.
Bloom era un Santo, pero él había muerto sin ser capaz de luchar en absoluto.
Para estas personas ordinarias, eso era simplemente inconcebible.
Ese era un Santo.
En ese momento…
El feroz rostro de Beaumont aullaba a través del aire, cargando hacia Olivier, esa cuchilla de guerra azul profundo en sus manos cortaba brutalmente hacia Olivier. Pero lo que le dio la bienvenida fue... ¡la deslumbrante espada de Olivier!
¡La oscuridad y la luz coincidiendo!
*¡Bang!*
