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Chapter 90 - Capítulo 90 - Los Cielos Están Prohibidos

Aún echado en el medio de la hierba, Linley contuvo su respiración mientras vigilaba.

—Ese montículo debe tener al menos cincuenta o sesenta manojos de Hierba Corazón Azul.

Linley pisó enérgicamente con una alegría salvaje. Pero la cosa que más asombró a Linley era…

Qué Bebe parecía sentir que no era suficiente, y continuaba jalando más y más Hierba Corazón Azul.

—¿Será capaz de llevar todo ese enorme montículo con esas dos pequeñas garras suyas? —Linley estaba un tanto confundido. Él de inmediato llamó a Bebe mentalmente—. Bebe, es suficiente. Vuelve aquí.

Bebe levantó su cabeza, miró a Linley, y luego arrugó su pequeña nariz.

—No hay prisa. Hay mucho más por llevar.

Justo en ese momento, un Velocidragón el cual estaba bebiendo agua de un río cercano pasó su mirada en esa dirección. Su mirada cayó en Bebe, claramente lo había notado, y él se levantó, resoplando humo mientras fijaba su fría mirada sobre el pequeño Ratón de las Sombras.

—Eso no es bueno.

El corazón de Linley se apretó.

Si Bebe comenzaba una batalla con el Velocidragón, tal vez más bestias mágicas podrían ser atraídas. En ese momento, la situación ser volvería incluso peor.

Bebe también notó al Velocidragón. Al verlo, Bebe pareció aterrorizado y de inmediato se escondió cerca de la Hierba Corazón Azul, 'temblando'.

—Growl…

El Velocidragón soltó un rugido en satisfacción, y luego se echó nuevamente y continuó bebiendo agua del río.

—Qué estúpido zoquete. Es muy fácil de engañar.

Bebe habló encantadamente con Linley mentalmente.

En ese momento, Linley no sabía si reír o llorar. Él no esperaba que el pequeño Bebe 'fingiese debilidad'. Linley sabía muy bien que hace un año y medio, Bebe fue capaz de forzar a un Velocidragón a huir. Después de otro año y medio de crecimiento, Bebe debería ser incluso más fuerte.

Bebe definitivamente no tenía miedo de un Velocidragón.

Pero era muy inteligente. Él sabía qué si él causaba mucho lío, Linley sería expuesto fácilmente.

¡Humanos!

Las bestias mágicas eran antagónicos hacia los humanos.

En los ojos de ese Velocidragón, Bebe no era más que una extremadamente pequeña y débil bestia mágica. Viendo cuan aterrorizado estaba Bebe, naturalmente no ser molestaría en matarlo. Después de todo, el Velocidragón sabía que entre los Ratones de las Sombras, solo los ratones de más bajo nivel tenían pelaje negro.

Pero el Velocidragón no tenía idea que uno de sus 'camaradas' había sido mutilado severamente por el pequeño Bebe.

—Formidable.

Linley le dio a Bebe un gran pulgar arriba.

Bebe rio con deleite.

—Naturalmente. Yo, Bebe, soy un extremadamente inteligente Ratón de las Sombras.

Dando una mirada a la gran pila de Hierba Corazón Azul a su lado, Bebe de repente expandió su cuerpo dramáticamente, desde veinte centímetros hasta cerca de medio metro.

Ahora que su tamaño se había incrementado, Bebe era capaz de usar con facilidad sus dos grandes patas para agarrar la pila de Hierba Corazón Azul contra su pecho. Entonces, con una flexión de sus piernas…

*¡Whoosh!*

De repente aterrizó en la hierba, directamente al costado de Linley.

—Jefe, es todo lo que pude, hay 160 manojos de Hierba Corazón Azul aquí. Hacer que yo, Bebe, tomase acción fue el plan perfecto.

Bebe infló su pequeño pecho arrogantemente.

Linley frotó adorablemente la pequeña cabeza de Bebe, y entonces metió toda la Hierba Corazón Azul en su mochila.

—Movámonos. Me estoy volviendo más y más curioso sobre este valle —los ojos de Linley brillaron mientras miraba hacia el Este—. Para que este valle tenga tantas bestias mágicas, y también tenga tal gruesa densidad de esencia elemental… Mmm, siento como que la densidad elemental aquí es incluso más gruesa que la primera vez que vinimos. La densidad de la esencia elemental aquí es diez veces más alta que en el mundo de afuera.

Linley tenía un presentimiento…

Un factor extraño estaba causando que la esencia elemental en ese valle fuese mucho más alta de lo normal, y debía venir del lado Este del valle.

Linley continuó dirigiéndose hacia el Este, haciendo su camino a través de la densa vegetación. Con la asistencia del hechizo de apoyo de tipo viento Supersónico, Linley era capaz de moverse muy rápido. ¡Un mago de séptimo nivel usando el hechizo Supersónico era capaz de moverse tres veces más rápido de lo normal!

Tres veces la velocidad normal de Linley como guerrero de cuarto rango.

*¡Whoosh, whoosh!*

Linley se escabullía rápidamente desde un punto hacia otro, esquivando una bestia mágica tras otra. Afortunadamente, además de esa parte la cual tenía una abundancia de pegasos, el resto del valle estaba lleno con abundante vegetación, lo suficientemente alta para esconder totalmente a Linley.

—Desde el punto donde entré al barranco hasta ahora, tal vez he ido hacia el Este por casi cien kilómetros.

Linley estaba muy asombrado.

Toda la Cordillera de las Bestias Mágicas tenía alrededor de mil kilómetros de ancho, así que para que un valle tuviese más de cien kilómetros de largo era asombroso. Basado en la distancia, Linley debía haber comenzado a acercarse a las regiones centrales de la Cordillera de las Bestias Mágicas.

—Oye, jefe. Hay pocas bestias mágicas aquí.

Colgado en los hombros de Linley, Bebe estaba escaneando constantemente todas las direcciones.

Linley asintió.

En un área con el radio de muchos kilómetros alrededor de ellos, solo dos bestias mágicas podían ser vistas. Era muy extraño el por qué la densidad de las bestias mágicas sería tan baja. Las dos bestias mágicas presentes eran Velocidragones gigantescos. Más importante… Esos dos Velocidragones están descansando en el suelo, aparentemente dormidos.

—Solo dos Velocidragones, y ambos durmiendo —Linley rio de una forma de auto burla—. Esta sección probablemente es la más fácil para viajar desde que entré a este valle. Pero debo decir que, esos dos Velocidragones son diferentes comparados a un Velocidragón promedio.

Linley notó que los cuerpos de esos Velocidreagones eran incluso más largos. Debido a que estaban echados, era difícil estar seguro, pero esos dos, incluso estando echados, eran casi tan altos como muchos Velocidragones que estaban de pie. Además, el largo de sus cuerpos era el doble que el de un Velocidragón ordinario.

Mientras estaban echados en la tierra, esos dos grandes Velocidragones parecían dos pequeñas montañas.

Con el fin de ser extra cauteloso, Linley pasó cuidadosamente a esos dos mientras se escondía en la vegetación que estaba a más de veinte metros de ellos. Pero Linley no notó que cuando pasó a través de la hierba, haciendo un suave sonido de 'swish', los oídos de los dos Velocidragones se sacudieron, a pesar de que sus ojos se quedaron cerrados y no se movieron.

Cuando viajaba a través de la hierba, por supuesto habría algo de ruido.

Pero Linley no le ponía mucha atención a eso, debido a como Linley lo veía, incluso el viento que soplaba a través de la hierba causaba sonidos de crujidos. Eso solo sería un poco más bajo que el sonido de una persona viajando a través de la hierba, nada más. Linley se había arrastrado a través de la hierba hasta ahora por mucho tiempo sin problemas.

*¡Swish!*

Una repentina mancha cortó a través del aire y cortó directamente hacia Linley. Linley, incluso mientras era impulsado por la Técnica Supersónica, solo fue capaz de detenerse a tiempo por un poco.

*¡Whack!*

Una larga y dracónica cola, tan rápida y flexible como un látigo, golpeó pesadamente el suelo justo al frente de Linley, tal vez a solo medio metro frente a él. La tierra se partió debido a ese golpe, y una hendidura de un metro de ancho apareció en la tierra. Linley ejerció fuerza rápidamente con sus piernas y comenzó a correr.

—He sido descubierto.

El corazón de Linley se estremeció.

—¡Growl! Growl…

Dos rugidos en sucesión. Los dos Velocidragones que habían estado durmiendo se levantaron de repente. Ambos eran de cuatro pisos de altura, y el tamaño de su cuerpos era de cuarenta metros, con sus colas haciendo otros cuarenta metros de largo. Su tamaño era absolutamente asombroso.

—¡Son enormes! Esos deben ser las élites de la raza Velocidragón. Probablemente son bestias mágicas de octavo rango.

El corazón de Linley tembló.

Esas eran las primeras bestias mágicas de octavo rango que Linley había encontrado en el valle. Como mago de séptimo rango, Linley tenía la confianza para luchar contra bestias mágicas de séptimo rango. Pero al encontrarse una bestia mágica de octavo rango, ni siquiera se atrevería a entretenerse con algún pensamiento sobre pelear, debido a que mientras más alto los rangos, la diferencia en poder entre cada uno era mucho más pronunciada,

Solo por el valor de los núcleos de cristal mágico, uno podía decirlo.

Un núcleo de cristal mágico de sexto rango. 1000 monedas de oro.

¡Pero un núcleo de cristal mágico de séptimo rango podía valer 50,000 monedas de oro! La diferencia entre el sexto y el séptimo rango imaginada fácilmente.

¿Un núcleo de octavo rango? ¡El precio podía llegar a 500,000 monedas de oro!

¿Mientras que un núcleo de cristal mágico de noveno rango? ¡El valor era de unas asombrosas 5,000,000 de monedas de oro!

Eso solo eran estimados generales basados en los libros de la biblioteca. En realidad, los núcleos de cristal mágico de algunas particularmente grandes y poderosas bestias mágicas eran extremadamente raras, e incluso más valiosas. A menudo, ni siquiera serían capaces de encontrarse en el mercado.

Una bestia mágica de octavo rango era mucho más poderosa que una de séptimo rango.

Los dos Velocidragones de octavo rango intercambiaron miradas. Una mirada de regocijo apareció en sus ojos, y luego giraron, cangando hacia Linley a alta velocidad.

La inteligencia de una bestia mágica de octavo rango definitivamente no era menor que la de un ser humano,

*¡Whoosh!*

A máxima velocidad, Linley comenzó a correr frenéticamente hacia el Este mientras comenzaba a recitar inmediatamente las palabras para el hechizo de tipo viento Técnica de Ascensión. Pero ya que era un hechizo mágico de séptimo rango, el encantamiento era muy complejo, y tomaba un poco de tiempo realizarlo.

En ese punto, Bebe tampoco se atrevió a intentar lucirse.

Él podía derrotar a un Velocidragón de séptimo rango, ¿pero a un Velocidragón de octavo rango? Solo basado en su tamaño, el cual era el doble de uno ordinario, Bebe sabía muy bien que sus dientes no serían si quiera capaces de morder a través de las escamas y llegar a su carne.

Su enorme tamaño significaba que ellos también tenían gruesas escamas. Cada escama de esos Velocidragones de octavo rango tenía más de medio metro de grosor, y bajo ellas una gruesa capa de músculos.

Herirlos sería extremadamente difícil.

Poseyendo la velocidad de un guerrero de cuarto rango impulsada por el hechizo de apoyo Supersónico, la velocidad de viaje de Linley era un poco más rápida que la de los Velocidragones. Esas enormes criaturas eran muy lentas, pero cada paso que daban cubría una gran cantidad de distancia. Cada paso suyo cubría tanta distancia como diez de Linley.

Más importante…

La cola que parecía un látigo de hierro de esos Velocidragones. Poseía la velocidad de un rayo, eran incluso más rápidas que las colas de un Velocidragón de séptimo rango. Con un destello y un parpadeo, ellas se movían docenas de metros, y estaban aproximadamente en el mismo nivel que la velocidad de Bebe.

La tierra se agitaba mientras esas dos enormes criaturas continuaban persiguiendo a Linley. Cada cuanto, ambos Velocidragones intercambiaban una extraña mirada el uno con el otro.

*¡Whooosh!*

Linley de repente voló hacia el cielo. Él finalmente había completado el encantamiento para la Técnica Ascendente.

—Finalmente estoy a salvo.

Voló más alto. Viendo a los dos enormes Velocidragones bajo él, finalmente soltó un suspiro de alivio.

—Esos dos Velocidragones de octavo rango fueron realmente siniestros. Ellos intencionalmente fingieron dormir con fin de tentarme.

En realidad, de lo que Linley no se dio cuenta era que los dos Velocidragones no estaban haciendo de señuelo en lo absoluto.

Sino que esos dos Velocidragones de octavo rango eran extremadamente sensibles a sus alrededores. Ellos estaban acostumbrados al sonido del viento que soplaba a través de la vegetación. Cuando ellos escucharon que la frecuencia del crujido cambiaba repentinamente, por supuesto que de inmediato sospecharían.

—Growl…

Los dos Velocidragones de octavo rango veían a Linley mientras se alejaba. Ellos no parecían molestos en lo más mínimo. En lugar de eso, levantaron sus cabezas a lo alto y rugieron. Ese sonido del rugido parecía ser casi… Feliz. Linley era capaz de diferenciar entre un rugido de furia, y un rugido de placer.

—Growl… Growl… Growl… Growl…

De repente, el aire sobre Linley se dividió con rugidos dracónicos, un rugido dracónico tras otro. Solo del número de los rugidos, uno podía decir que había un extremadamente gran número de bestias mágicas presentes.

—Están sobre mí.

Deteniéndose en medio del aire, Linley observó hacia arriba. Desde dentro de la blanca, y brumosa niebla, una enorme bestia dracónica tras otra comenzó a emerger, cada una de ellas era de setenta u ochenta metros de largo, y con unas enormes alas de cincuenta o sesenta metros de largo.

Múltiples y enormes figuras dracónicas estaban suspendidas ahí en la niebla blanca. Linley podía decir de una mirada cuantas habían.

—Al menos unas cuantas docenas.

Linley sintió que no podía respirar.

Una enorme bestia dracónica voladora tras otras descendió desde los cielos. Sus escamas color llama eran muy resplandecientes, y las llamas parecía pestañear alrededor de todos sus cuerpos.

—¡Dragones de Fuego!

Linley sabía que la situación se había vuelto catastrófica.

Los Dragones de Fuego eran considerados bestias tipo dragón de clase media. Muchos Dragones de Fuego eran bestias mágicas de octavo rango, mientras que sus miembros de élite podían llegar al noveno rango.

—Dos bestias mágicas de octavo rango fueron capaces de darme muchos problemas. Ahora, estoy tratando con diez que pueden volar.

Linley se sintió extremadamente miserable.

Y justo en ese momento…

—Growl…¡Growl!

Otras series de rugidos comenzaron a emanar desde una dirección diferente. Y entonces, una criatura voladora tras otra, cada una de aproximadamente el mismo tamaño de un Dragón de Fuego, comenzaron a expandir sus masivas alas y volar en esta dirección. Esas enormes bestias dracónicas voladoras tenían escamas verde oscuras que eran tan claras como el jaspe[1].

Esas bestias dracónicas voladoras con escamas verdes no eran menores en número cuando se comparaban a los Dragones de Fuego.

Los dos Velocidragones de octavo rango debajo de Linley comenzaron a rugir en regocijo, sus ojos estaban llenos con una malicia siniestra.

—Ahora sé por qué cuando entré a esta área, solo vi a esos Velocidragones de octavo rango y no vi nada más —Linley se sentía miserable—. Probablemente, solo las bestias mágicas de octavo rango tienen permitido residir en esta área. Las bestias mágicas de séptimo rango no se atreverían a entrar. Estos Dragones de Fuego y Dragones Esmeralda son bestias dracónicas de tipo manada de octavo rango. Probablemente, esos dos Velocidragones solo estuvieron jugando conmigo todo este tiempo. Cuando vieron que estaba a punto de alejarme y escapar volando, ellos de inmediato rugieron para hacer que los Dragones de Fuego y los Dragones Esmeralda también saliesen.

Más de cien masivos dragones voladores estaban haciendo círculos sobre él en el cielo. Solo en ese momento Linley se dio cuenta de lo que estaba pasando.

Pero en ese momento, ¡el camino a través de los cielos estaba prohibido para él!

—Jefe, ¿qué vamos hacer? —la lastimosa voz de Bebe sonó en la mente de Linley.

[1] Piedra silícea de grano fino, opaca, que generalmente forma vetas de diversos colores.