El Tártaro se dividía en un total de ochenta y un territorios.
Aunque se llamaron territorios, en realidad, representaban ochenta y un islas enormes. En el pasado, cuando el Dios Supremo de la Muerte había creado el Inframundo, había dejado atrás esa inusual región en lo profundo del Mar de las Tinieblas; El Tártaro. Esas ochenta y un islas son todas comparables en tamaño y son muy cercanas entre sí. Si uno mira un mapa de ellas, uno vería que estaban dispuestas en una forma redonda.
—¡Tártaro, el lugar de reunión para los expertos del Inframundo!
Linley estaba de pie en el aire, mirando las islas distantes.
El Tártaro era como el 'Purgatorio' del Reino Infernal; muchos expertos que amaban batallar se reunían allí. Ellos eran arrogantes e inflexibles, y les encantaba luchar. ¡Después del paso de incontables años, los ochenta y un territorios del Tártaro dieron a luz a ochenta y un Lords! ¡Los Lords de Tártaro eran, por lo tanto, expertos supremos!