Linley recordaba el nombre 'Reisgem' muy, muy claramente.
De vuelta en las Montañas Amatista cuando Linley había estado probando 'Marcha Terrestre', él había caído en manos de esa bestia amatista juvenil, quién había anunciado su nombre y dicho que él era un Comandante del Purgatorio, queriendo intimidar a Linley. Por desgracia, Linley no tenía idea de lo que era el Purgatorio y por lo tanto no tenía idea de lo que significaba que una persona fuese un Comandante del Purgatorio.
*Crackle*
Innumerables hebras de energía negra rodearon a Linley, y eran incomparablemente rígidas, causando que fuese totalmente incapaz de moverse. A pesar de que su fuerza era masiva e inagotable, la velocidad a la que destruía las ataduras de energía negra era más lenta que la velocidad a la que se incrementaban.
—Niño, no utilices tu Poder de Soberano. Estarías malgastándolo si lo hicieses —continuó la voz baja y gentil.