La montaña detrás del Instituto Ernst, un lugar de tranquilidad.
Linley se sentó de piernas cruzadas al lado del pequeño río. Escuchando los murmullos del agua, entró naturalmente en estado meditativo, y toda la esencia de la tierra y el viento cercanos comenzaron a brillar. Todo lo que había dentro de diez metros alrededor de Linley se convirtió en algo extremadamente claro.
La esencia de la tierra y el viento entraban en su cuerpo a través de sus cuatro extremidades, mientras su carne, huesos y órganos las absorbían lentamente, nutriéndose poco a poco. Lenta pero resolutamente, la fuerza de su cuerpo continuaba aumentando.
Adicionalmente, una gran porción de esencia de viento y tierra, después de purificarse, iban a descansar en el 'dantian central' en el medio de su pecho.
*Splash, splash*
El flujo de agua murmuraba incesantemente.
A su lado, el pequeño Ratón de las Sombras, 'Bebe', estaba masticando un pato silvestre. La escena era tan pacífica como una pintura.
Pero mientras allí era pacífico, el Instituto Ernst era extremadamente ruidoso. Todos los miles de estudiantes, muchos magos, e incluso muchas importantes personas del mundo de fuera del Instituto Ernst observaban las numerosas batallas.
El torneo anual.
¡Todos los estudiantes del Instituto Ernst eran estudiantes orgullosos, bendecidos por el cielo!
Cada batalla era asombrosa. Entre los estudiantes de primer grado, había bolas de tierra, destellos de rayos, y cuchillas de viento que volaban y golpeaban personas. Pero las batallas de los estudiantes de tercer y cuarto grado eran realmente asombrosas. Usaban hechizos de apoyo y hechizos de área de efecto. Hechizos tales como 'Quebrantar Rocas' causaban que docenas, acercándose a cientos de grandes rocas se dirigieran a las cabezas de los oponentes. Los rayos se disparaban sin cesar.
¿Y los de quinto y sexto grado? Eso era aún más terrorífico.
Todo tipo de hechizos asombrosos destellaban continuamente, llenando todo el complejo con el sonido de las explosiones. Los estudiantes que los veían estaban rugían sin cesar mientras sus energías se incrementaban. Virtualmente todas las personas del Instituto estaban allí.
...…
El torneo anual duraba poco más de un mes, el cual, naturalmente, era el más salvaje y ruidoso mes de cada año en el Instituto Ernst. Durante ese frenético periodo, Linley ocasionalmente veía las batallas de los estudiantes de quinto y sexto grado. Todo el resto de su tiempo lo pasaba entrenando por sí mismo en tranquilidad.
—Este torneo en realidad requiere que uno intencionalmente intente no matar a su oponente. ¿Cómo puede ese tipo de competencia ser considerada una pelea real, cuando las manos y los pies de uno están atados?
Bajo la influencia de Doehring Cowart, Linley también comenzaba a ver la competición con desdén.
—Linley, tu tarea actual es entrenar y construir tu fuerza. Y sobre la experiencia de batalla, cuando te conviertas en un mago de quinto rango, debes entrar en la Cordillera de las Bestias Mágicas y tener una serie de genuinas experiencias de vida o muerte.
Doehring Cowart persuadió a Linley.
...…
El Hotel Huadeli, el hotel y restaurante más caro dentro del Instituto Ernst.
Esa noche, Yale estaba invitando a los cuatro hermanos del dormitorio 1987 a una lujosa cena en el Hotel Huadeli.
En el primer piso del Hotel Huadeli.
El piso del hotel era tan reflectante como un espejo. Una fila de hermosas meseras estaban de pie, cortésmente listas para responder a las órdenes del momento.
Había muchos hombres y mujeres vestidos con atuendos de estudiantes en el Hotel Huadeli. Aquellos que eran capaces de permitirse cenar ese lugar eran generalmente los tenían fuertes trasfondos económicos. Una mesa casual de platos podría costar unas cuantas docenas de monedas de oro. Si Linley iba por sí mismo, definitivamente no sería capaz de permitírselo.
El torneo anual había terminado, y todos los estudiantes en el hotel estaban discutiendo sobre ello. Muchas de las personas eran jóvenes, pero una mesa estaba llena con cuatro niños.
—Me pongo furioso con tan solo pensar en la competencia de este año. ¡Estuve tan cerca! Estuve tan cerca de entrar en las semifinales. Quizás hubiese sido capaz de entrar en el top tres.
Reynolds estaba extremadamente insatisfecho. Él era el más joven de los cuatro, y también el más orgulloso de ellos.
Yale rio.
—Realmente es una pena. No esperaba que Rand se convirtiese en el número uno al final.
George lanzó una risa pero no habló. Él era un tipo amigable y no ofendía a nadie.
—¿Rand? Cierto. Los escuché discutiendo sobre él antes. Él es uno de los nuevos estudiantes que tienen afinidad elemental y esencia espiritual excepcional, ¿cierto?
Linley recordaba el nombre de 'Rand'.
George rio y asintió.
—Cierto. Es muy talentoso. Incluso antes de entrenar, su esencia espiritual había llegado al nivel de un mago de segundo rango. Todo lo que hizo este año fue acumular suficiente fuerza mágica. No es muy difícil para alguien con el poder de un mago de segundo rango convertirse en el número uno en el torneo de los estudiantes de primer grado.
—¿Confiando solo en su talento? Cuando se trata de talento, ¿puede comparársele al genio número uno de nuestro Instituto, Dixie? —Yale arqueó sus labios en una sonrisa—. Menosprecio a Rand. Él ganó el torneo de primer grado, ¿y qué? Linley, no viste cuan satisfecho se veía al ganar. Realmente no puedo imaginar cómo se vería si ganase los torneos de quinto o sexto grado en el futuro.
Mientras más fuerte se hacía un mago, más difícil le era progresar.
Ese era el por qué la gran mayoría en el Instituto Ernst eran magos de nivel alto. Mientras más alto el grado de uno, más feroz era la competencia.
Reynolds también asintió.
—Tampoco me gusta. El genio número uno de nuestra escuela, Dixie, ganó el torneo de tercer grado. ¡Observa cuan sereno estaba! La diferencia entre los dos es enorme. Lo que es más, el más fuerte entre nosotros los de primer grado no es Rand...
—Cierto. Tercer hermano, tú no participaste. Si lo hubieses hecho, hmph…—carraspeó Yale.
En base a la edad y antigüedad, los cuatro hermanos habían comenzado a dirigirse unos a otros como 'segundo hermano', tercer hermano', y así.
—Oigan, ¿qué están diciendo?
Linley y Yale giraron sus cabezas. Cuatro jóvenes en el mismo hotel estaban bajando desde el segundo piso. Su líder, un joven de cabello dorado, miró al grupo de Linley con frialdad.
Yale dijo en voz alta: —Oh, es Rand. ¿Qué, no escuchaste lo que estamos diciendo?
Linley no pudo evitar reír, sin poder hacer nada.
Yale no le temía al cielo o al infierno, y le importaba tremendamente el prestigio.
—Hmph, no creas que no lo escuché—dijo Rand con frialdad.
El joven de cabello marrón al lado de Rand también se mofó. Arrogantemente dijo: —Rand, no gastes tu tiempo con esas cuatro cosas inútiles. No son dignos de tu tiempo. Reynolds, ¿qué crees que estás viendo? ¿Qué, no estás satisfecho con la forma en la que perdiste en el torneo?
Reynolds miró al joven de cabello marrón, y su boca se arqueó con desdén.
—¿Qué te crees que eres? Solo tuviste suerte y me venciste una vez. ¿Por qué eres tan altanero?
El rostro del joven de cabello marrón se volvió frío.
George sonrió a todo el mundo y dijo: —Rand, basta. Fue una equivocación de nuestra parar el hablar sobre ti tan casualmente. Solo olvidémoslo.
—Cierra tu boca George. Este no es asunto tuyo —Rand miró a Yale—. Yale, la última vez que te vi en el bar 'El Olmo Fragrante', tu actitud arrogante me enfureció. Y ahora, esta vez, te atreves a ser tan arrogante frente a mí. Si tienes la habilidad, ven y lucha conmigo. ¿Por qué no tienes las pelotas para luchar conmigo?
Después de hablar, Rand intencionalmente se rio burlonamente unas cuantas veces.
A pesar de que Yale estaba furioso, sabía que no era tan fuerte como su oponente.
De inmediato muchas miradas desde todo el hotel se concentraron en ese altercado. Muchos de los estudiantes de alto rango del Instituto Ernst se pusieron de pie y miraron a los dos grupos con curiosidad. Claramente ambas partes tenían solo diez años.
—Conozco a ese niño de cabello dorado. Su nombre es Rand. Él ganó el torneo anual de entre los de primer grado. Espero que en el futuro tenga algunos logros significativos.
—El niño de cabello marrón a su lado se llama Rickson. Él fue el número tres entre los de primer grado. Lo conozco. En términos de fuerza, el grupo de Rand es más fuerte que sus oponentes. Esto debe ser divertido.
Los grupos de magos de quinto y sexto rango estaban charlando y riendo mientras observaban a los dos grupos.
Al ver que otros lo notaban, y al escucharlos alabarlo como el ganador del torneo anual de primer grado, el rostro de Rand se tornó incluso más arrogante, y miró a Linley y a los otros con incluso más desdén.
—Hmph —Rand miró a la mesa donde Linley y los otros estaban sentados—. ¿Jugo? ¿Ustedes todavía beben jugo? Oh, Yale, me siento avergonzado por ti. Los cuatro hermanos de mi dormitorio estábamos bebiendo vino debido a mi victoria. ¿Y ustedes están bebiendo jugo?
Al ver como Rand se había pasado de la raya, Linley no pudo evitar fruncir el ceño.
—Rand, mis hermanos y yo estábamos comiendo. Vete al infierno.
Linley miró fríamente a los cuatro de ellos.
Si él estuviera entrenando y fuese molestado por las bestias las mataría de inmediato.
—Oh, y este…—los ojos de Rand brillaban mientras miraba a Linley—. ¿Cómo nunca me di cuenta de que en el dormitorio de Yale, estaba alguien como tú?
La mirada de Linley se volvió aún más fría.
Como un conejo silvestre, él se disparó hacia adelante con una increíble velocidad. Los ojos de Rand solo tuvieron tiempo de agrandarse.
—¡Tú…!
Antes que pudiese reaccionar, Linley agarró a Rand por su garganta, y solamente con fuerza física, lo levantó en el aire.
—Wha, uh, uh…
Rand no podía hacer que ninguna palabra saliese de su garganta, y sus ojos estaban llenos de miedo.
Linley lo miró con frialdad. Rand, con el corazón lleno de miedo, sintió que podría ser asesinado en cualquier momento.
En ese momento, Linley sentía que la Sangre de Dragón en sus venas comenzaba a calentarse, y su naturaleza de que buscaba sangre comenzó a despertar. Linley no pudo evitar fruncir el ceño mientras trataba de calmarse.
—Este es el Instituto Ernst. No pudo matar a nadie por ninguna razón.
Los tres estudiantes al lado de Rand también estaban estupefactos y asustados.
—¡Váyanse a la mierda!
Con un movimiento de su brazo, Linley lanzó a Rand al suelo, como si no fuese más que un saco de arena.