La repentina partida de Linley hizo que el grupo de personas en el Castillo Sangre de Dragón se sintiese un poco preocupado.
—Padre, ¿la razón por la que Tío se fue justo ahora, fue debido a que va a investigar...? —dijo Cena en voz baja.
A pesar de que no terminó las palabras, todo el mundo en la sala entendía. Ellos, también sospechaban que el culpable detrás de la aparición a gran escala de las ciudades muertas en el Imperio Rohault era una Deidad. Si Linley fuese a luchar contra otra Deidad, ¿cuál sería el resultado?
—Conozco el temperamento de mi hermano mayor muy bien —Wharton frunció el ceño—. A pesar de que no le gusta involucrarse en cosas que no tienen nada que ver con él, él definitivamente no eludirá ninguna de sus responsabilidades.
Cierto. ¡Las responsabilidades de Linley!
Todo el mundo en el salón, Delia incluida, asintió levemente.