Prácticamente la totalidad de los habitantes de ese pequeño pueblo secreto en la parte Sur de las Tierras Anárquicas se agruparon allí, mirando a Miller, Livingston y Linley mientras volaban sobre ellos. Esos miles de personas al instante se emocionaron y comenzaron a gritar los nombres de los dos Santos.
—¡Miller! ¡Miller! ¡Miller! ¡Miller!
—¡Livingston! ¡Livingston! ¡Livingston! ¡Livingston!
Una oleada de aplausos resonó adelante desde el valle. El ambiente era muy animado y lleno de energía. Miller, Livingston, y Linley volaron hacia el centro. Miller simplemente extendió su mano y la agitó, y todos en la zona se quedaron en silencio.
Todo el mundo miraba a esas tres personas en el centro, y muchos también se dieron cuenta del pequeño y lindo Ratón de las Sombras en los hombros de Linley.
Una sonrisa apareció en el rostro de Miller.