—¡Patterson! —mencionó silenciosamente ese nombre en su cabeza. Su madre había sido secuestrada por los hombres de Patterson años atrás, y ahora, once años después, su padre había sido herido y asesinado también por los hombres de Patterson mientras investigaba sobre el paradero de su madre.
El intento asesino en el corazón de Linley se encontraba oculto, como la lava en el fondo de un volcán dormido. Pero un día, haría erupción.
—Jefe, deja que mate a ese Patterson por ti —dijo Bebe mentalmente mientras estaba arrodillado al lado de Linley
—No te muevas –respondió mentalmente.
Linley se mantuvo arrodillado dentro de la sala principal, mientras un noble tras otro entraba, dando sus respetos al padre de Linley.
...…
En ese banquete nocturno, Linley no se presentó en ningún momento. Se mantuvo arrodillado dentro del salón, observando los ritos de luto filial.