Jade Negro y Alama de Muerte miraron a Ci Wei Ka.
—Ci Wei Ka —dijo Alma de Muerte—, a pesar de que no queremos admitirlo, con la fuerza y los aliados del emperador alas plateadas, no tenemos forma de matarlo.
—Hm —dijo Jade Negro asintiendo.
—Demonios —dijo Ci Wei Ka entre dientes.
Si tan solo país de los nueve dioses absolutos estuviera completo, eso solo podría detener al emperador alas plateadas y prevenir que escape. El país de los nueve dioses absolutos tiene formaciones prohibidas para detener guerreros, cuando pelearon Ci Wei Ka dudó en usarlas.
Como estaban prohibidas, cada sello costaba mil millones de gemas índigo, por eso dudó.
¿Detener a un emperador pináculo costaba tanto?
La duda…
Hizo que sea demasiado tarde.