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El emperador Llama estaba parado en medio del palacio con los ojos cerrados. Él usó una porción de su mente para sentir la onda espacial alrededor de la nave de Luo Feng. Cualquier onda lo alertaría.
"Emperador Llama subestima a ese humano", pensó caballero Ba Feng, "Él es un maestro del universo, y no necesita prestarle atención al humano."
Sin embargo, caballero Ba Feng apoyaba al emperador Llama en silencio y con respeto.
—¿Hmm? —dijo emperador Llama abriendo los ojos.
¡Hua!
De repente, la nave biológica se detuvo, y una figura de armadura dorada salió volando, envuelto en una borrosa luz verde.
—¿Teletransportación vía país divino? —dijo emperador Llama sorprendido—. ¿Acaso mi tercer hermano se rindió y se prepara para irse?
La teletransportación vía país divino está permitida en áreas con espacio cerrado.