En el mar.
Los tres buques de guerra ferdianos arrastraron el gigante y navegaron lentamente sobre el mar. No fueron hacia Ferde y lo dejaron allí. De lo contrario, todo el mundo sabría que robaron la isla de los Altos elfos, y eso causaría un montón de problemas. Para cosas como esta, era mejor hacer una fortuna sin hacer ruido.
Navegaron durante tres días, evitando cuidadosamente todas las otras naves. Al anochecer del tercer día, los tres buques de guerra se detuvieron en una bahía apartada en el sur de Ferde.
Estaban a alrededor de 10 kilómetros de la tierra.
—Bien, todos ustedes regresan al muelle. ¡Recuerden, no pasó nada hoy! —dijo Link a Jacker, que estaba en el buque de guerra.
—¡Entendido! —dijo Jacker a Link.
