En la Cuenca Neblinosa.
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Después de apartar un montón de ramas a un lado, Link vio una Torre de mago negra junto al lago.
«¡La Torre de mago de los no-muertos!» fue el primer pensamiento que surgió en su mente.
Colores oscuros, extrañas esculturas de piedra, fluctuaciones de aura de magia negra: las características de la Torre de mago señalaban la identidad de su propietario.
Los nigromantes: debido a que manipulaban cadáveres y explotaban almas, fueron abandonados por los dioses del Panteón de la luz.
Si un nigromante nacía originalmente en el Reino de la Luz, una vez que se dedicara al lado oscuro y a la magia negra, su alma tendría prohibida la entrada para siempre al Reino Glorioso donde residían los dioses del Panteón de la Luz.
El alma de un nigromante vagaría por siempre en el limbo y su vida continuaría en ese estado indefinidamente. Este era su estado de inmortalidad.
