Hace seis días…
El gran mundo, en la dimensión no-muerta.
Desde su asiento en la silla de serpiente dorada, la expresión en la cara del hombre de cabellos dorados parecía extremadamente desagradable.
Las doce oleadas de exploraciones habían resultado en un fracaso. No solo eso, sino que todo el escuadrón también había sido aniquilado una vez más.
No importa cuántos dioses virtuales envió en estas misiones de exploración, este mundo de grava, con todas sus reglas incompletas, era similar a un agujero negro interminable que se tragó todo, sin dejar rastro en absoluto. Ni una sola pieza de información había logrado hacer su camino de regreso aquí.