Toda la isla Elam y los alrededores hasta cientos de kilómetros de distancia fueron vueltos tierra muerta en cuestión de minutos. El capullo negro verdoso que estaba apagado estaba ahora vibrando puesto que había absorbido la vida de la isla. Aunque seguía siendo el mismo verde oscuro, ahora daba una vibración misteriosa. Todas las plantas eran negras como quemadas, y la selva una vez oscura y densa estaba ahora expuesta a la luz del sol abrasador.
Bajo el sol, el capullo reflejó un ligero resplandor que lo hacía parecer cubierto por una fina neblina verde-negruzca. Mientras Lin Huang observaba los cambios en el capullo, estaba calculando la probabilidad de ganar esa pelea.