Hace dos días, en medio de la noche, en un viejo y tenue almacén en el suburbio oriental de la Capital Blanca, tres personas aparecieron de la nada cuando por lo general casi no había nadie.
Los tres vestían túnicas negras que no tenían logos. Escondieron sus caras bajo la capucha. Bajo la tenue luz, sus máscaras bajo la capucha podían verse débilmente.
—Esperemos un poco. Los Cuervos Púrpura estarán aquí pronto.
La voz del líder era suave y profunda bajo el caparazón de modulación de voz. Las otras dos personas estaban allí sin decir nada mientras esperaban pacientemente. Pronto, otras cuatro personas aparecieron en el almacén. Los cuatro estaban vestidos igual que los tres. Vestían túnicas negras con capuchas y máscaras de diferentes diseños en sus caras.
—Muy bien, ya que todo el mundo está aquí, vamos directamente a los negocios.
La voz suave fue escuchada de nuevo.
