Los Gigantes de Hielo eran una raza de espíritus de hielo que nacieron del hielo y la nieve.
Como recién nacidos, ya estaban virtualmente al nivel de los dioses con cuerpos cristalinos blancos. Cuando alcanzaran la madurez, podrían alcanzar más de cien metros de altura y alcanzaron elevados al verdadero nivel de los dioses; sus cuerpos también se volverían de color azul hielo.
Este tipo de monstruo era un demonio elemental innato de nivel mítico de clase 4. Sus capacidades defensivas eran extremadamente poderosas; si se coloca entre criaturas de nivel mítico de la misma clase, aún se las arreglaría para estar en los primeros puestos. En cuanto a la fuerza, tampoco era débil; entre la misma clase de seres de nivel mítico se consideraba de nivel superior. Aparte de esto, también poseía habilidades curativas extremadamente fuertes y era capaz de extraer la humedad del aire para regenerar su propio cuerpo.
