Los carros de caballos recorrían las calles de Río Blanco.
Mientras Shi Feng cabalgaba cómodamente en uno de esos vagones, podía sentir los tremendos cambios que habían barrido la ciudad.
Más carros de caballos se movían por las calles que antes. Además, ahora había más variedades.
Dominio de Dios evolucionaba con el tiempo. Del mismo modo, las ciudades PNJs también cambiaban con el tiempo. Nada quedaba igual para siempre.
Era posible que los jugadores comunes no pensaran mucho en la cantidad o variedad de los carros de caballos, pero para Shi Feng, que había jugado Dominio de Dios durante más de una década, esos cambios simbolizaban la prosperidad de la ciudad.
¿Cómo podía uno determinar cuán próspera era una ciudad?
El criterio más básico era el transporte de caballos. Era similar a los automóviles en una ciudad real.