El bosque pareció haberse torcido por un poder que lo convirtió el día a noche.
En el aire, los cuerpos del Jefe de la familia Sol Dorado y del anciano del sombrero de hierba luchaban.
*¡Shu! ¡Shu!*
Dos cuchillas perforaron silenciosamente sus cuerpos. El jefe de la familia Sol Dorado no tuvo tiempo de esquivar y su fuerza vital fue destruida.
—Tú...
El Jefe de la familia Sol Dorado levantó la cabeza y se las arregló para ver la silueta del Dignatario de Asesinato.
*¡Plop!*
Cayó en un charco de sangre, sus ojos llenos de miedo y renuencia.
¿Cómo podría alguien querer morir así?
En el otro lado, el anciano del sombrero de hierba se las arregló para moverse a un lado por unos centímetros, pero la cuchilla aún raspó su corazón.
—Un Soberano del Dao del Asesinato…. ¿Eres el Soberano de Asesinato?
El anciano del sombrero de hierba tosió sangre.