Un ojo dorado apareció en el cielo. Parecía estar arraigado en el Cielo y la Tierra, y destellaba con una profunda luz dorada mientras miraba hacia abajo con frialdad.
Incluso el cuerpo del Dragón Serpiente Negra de la Destrucción se sacudió ligeramente, y sintió una gran presión cuando observó este Ojo del Cielo.
—¡Oh, santos cielos! ¡¿Eso es...? —Todos los expertos del Palacio del Qin del Santo del Cielo parecían petrificarse, y sus voces empezaron a temblar.
Más y más expertos en la Zona del Qin del Cielo vieron el Ojo Dorado del Cielo, y estaban completamente sorprendidos y aturdidos.
—¿Qué tipo de existencia es ese ojo...? —La Maestra del Palacio del Qin del Santo del Cielo y Li Xueyi se estremecieron.
Aparte del Dragón Serpiente Negra de la Destrucción, todos los que vieron este Ojo del Cielo se sintieron incapaces de respirar y sus almas comenzaron a temblar.
