—Zhao Feng, ¿te atreves a atacar al Palacio de las Nueve Oscuridades? —El Rey Sagrado Espíritu de Pluma miró a Zhao Feng y lo interrogó en un tono frío.
—¿Y qué si me atrevo? —Zhao Feng respondió fríamente con una expresión tranquila.
El Rey Sagrado Espíritu de Pluma se detuvo. La actitud fría y desdeñosa de Zhao Feng lo asustó un poco. Sin embargo, aunque el Rey Sagrado Espíritu de Pluma sabía que no era el rival de Zhao Feng, el Gran Salón Imperial estaba detrás de él. Con un respaldo como este, no tenía por qué asustarse de Zhao Feng.
—Ahora que las dos dinastías lord están luchando continuamente y podrían comenzar una guerra nuevamente en cualquier momento, el Salón de los Dioses destruyó un poder de nivel pico de tres estrellas de la Dinastía Lord Gran Gan. ¿Tienes algunas intenciones ocultas? —La expresión del Rey Sagrado Espíritu de Pluma era fría conforme lo interrogaba.