El Río de Sangre del Abismo fluía con calma, y bajo el misterioso ritual del Señor de los Demonios, el río en realidad fluía corriente arriba, en dirección a los Planos Superiores.
Marvin, que se había disfrazado de Demonio, no sabía que en realidad se había infiltrado en el Ejército Demoníaco y que estaba participando en la invasión de Feinan hasta que vio la Puerta Abisal frente a él y ese bosque familiar.
¿Esto es...Feinan?
Los ojos de Marvin brillaban.
Había estado a la deriva en el abismo sin fondo durante medio mes, buscando una forma de regresar a Feinan. Sin embargo, debido a la persecución de los Dioses, tuvo que contener su aura. Sin el Dragón del Tiempo Eterno acompañándolo, Marvin no podría viajar entre Planos por su cuenta. El único punto de teletransportación al que podía llegar era el Valle del Río Blanco, y en su primer intento, fue detectado por los Grandes Dioses, y casi fue atacado por Grant y Anubis.