Pero lo que sorprendió a Mano Pálida fue que, a pesar de que descubrió cuál era la sala del tesoro oculto y presionó el botón, ¡la puerta no se abrió!
¿He cometido un error?... Cielo instintivamente sintió que algo andaba mal.
Ese chico Kerry lo hizo sentir incómodo. Esto era extraño ya que era un gran experto. ¿Por qué debería estar preocupado por un Explorador de Rango 4? Frunció el ceño. Tenía cierta comprensión hacia Saruha, pero no sabía mucho más que los mercenarios de la Araña Lobo. Incluso si podía ignorar el Cristal de Pesadilla, no podía pasar por esas pesadas puertas de piedra. Él no era un Mago después de todo. No tenía un hechizo ni ningún elemento que le permitiera pasar a través de las paredes.