Al tener activado el Rastreo Nocturno, la línea roja que vio no era muy larga.
Marvin giró en un ángulo cerrado, pero, de pronto, cayó una masa oscura.
¡Araña Negra!
Marvin se paró con suavidad, para colocar un poco de distancia entre él y la Araña Negra. Pero en ese momento, Marvin notó algo.
¡Vio una prenda de vestir debajo del estómago de la Araña Negra!
Era el vestido de Lola.
¡Maldición!
La ira se apoderó de Marvin. ¿Esa bestia se había comido a Lola en tan poco tiempo?
Acudió a toda velocidad, dando un solo paso pero, para su sorpresa, escuchó un ruido extraño. Desde el lomo de la Araña Negra asomaba la punta de una cuchilla.
Marvin se quedó paralizado.
Las ocho patas de la Araña Negra temblaron y se oyó un gemido que provenía desde abajo de ella.
—Ayuda….
—Moriré aplastada…
Marvin se había quedado sin habla.
¡No había notado que cuando la Araña Negra cayó del techo parecía no tener vida!
