Una vez que Zhang Yang aseguró el aggro del jefe, todos los otros jugadores melee se lanzaron a la batalla. Los otros atacantes de rango permanecieron atrás, mientras mantenían la mayor distancia posible para atacar. Antes del jefe final todos se habían su tiempo, golpeando y atacando lentamente a los jefes, sin sentir ninguna urgencia. Como los jefes anteriores eran tan sólo de categoría Gris/Plata, nadie se sintió presionado y habían superado fácilmente los obstáculos. Sin embargo, al tratarse del jefe final, todos se mantuvieron alerta, conscientes de que era un jefe Amarillo/Oro.
Con un amplio rango de "seriedad", el daño producido en esta ocasión fue mucho mayor.