Todos los monstruos de tipo mágico eran más débiles y fáciles de derrotar en comparación con los monstruos físicos, pero cuando se peleaba con una multitud de ellos, no importaba qué tan fuerte sea el jugador, un golpe de magia arcana era suficiente para enviarlo a la tumba.
El grupo no se atrevió a atraer a demasiados monstruos a la vez y sólo se enfrentaban a dos o tres al mismo tiempo. Aunque la velocidad del combate era mayor que peleando con uno a la vez, la eficiencia no era la misma que al enfrentarse a un grupo numeroso, como en el primer piso. Así que el progreso era, obviamente, más lento y la acumulación de experiencia también llevaba más tiempo. Aun así, esto sólo fue entre el primer y segundo piso, y el progreso era mejor que en solitario.
