Su fría mirada no podía esconder el lado sensible de su cuerpo, y Zhang Yang claramente lo sintió. Debajo de su delgado uniforme, él podía sentir esas montañas bajo sus manos. Por algo la gente dice que mientras más fría es una mujer, su cuerpo es más sensible, ¡este es el ejemplo perfecto! Zhang Yang la soltó, se dio vuelta y se paró. La policía hizo lo mismo, su rostro estaba visiblemente sonrojado. Ella era hermosa y tierna, y al mismo tiempo glamorosa.
La multitud a su alrededor llamó de pronto, y Zhang Yang usó la chance para escapar de la escena con el rabo entre las piernas. Sabía que cometió un error y si se quedaba ahí le tratarían de pervertido y lo arrestarían. Viéndolo correr la policía zapateó con ira, haciendo que sus pechos reboten con cada paso. Se dio vuelta y regresó a la estación de policía con los 3 embaucadores.
