Luego de unos segundos, la recepcionista colgó el teléfono y dijo, disculpándose: —Llamé a su línea de oficina pero nadie respondió. Tal vez están en cirugía.
—De acuerdo, gracias —agradeció cortésmente y fue directo al salón de emergencia en el departamento de obstetricia y ginecología que se encontraba en el cuarto piso.
Qin Chu vestía pantalones casuales con camisa de vestir hecha a medida color azul marino. En sus manos llevaba una bolsa de comida.
Contemplaba como debería persuadir a Huo Mian, pero se dio cuenta que la puerta de la oficina de obstetricia y ginecología estaba abierta, sin nadie adentro.
Huo Mian probablemente fue a ver a algún paciente por eso no estaba en la oficina a esta hora, pensó para sí mismo mientras encendía un cigarrillo y recostaba contra la pared del pasillo.
Era muy tarde de noche, no había casi nadie en el hospital, así que no había nadie que tuviera un problema con que fumara.