Después de cerrar la puerta, Wendy miró a todos y finalmente se detuvo en Azima.
—Di lo que tengas que decir. —Esta última abrió la boca y dijo con voz áspera —. Si estás aquí para el reclutamiento de hoy, guárdatelo. No vamos a cambiar de opinión.
—Azima... —murmuró Doris involuntariamente.
Azima levantó la mano para evitar que Doris siguiera hablando.
—Recordaré con firmeza que nos cuidaron el último medio mes, pero esos dos asuntos no son lo mismo. Como se dijo cuando recién llegamos a Nuncainvierno, ahora que la Iglesia ha sido destruida, tendré para salir de la región occidental tarde o temprano.
—Tengo una mejor noticia para ti primero. —Wendy mantuvo su suave expresión y respondió—. El ayuntamiento ha recibido un informe que indica que un gran grupo de refugiados de la Región Oriental llegará a Nuncainvierno dentro de una semana. El número será de hasta 12.000 personas. Hay una alta probabilidad de que tus familiares estén entre ellos.
