Roland se encogió de hombros, parecía que tenía que trabajar más duro. Ser superado por sus propios subordinados nunca fue algo de lo que estaría orgulloso.
Afortunadamente, la ciudad de Aguasrojas ya había vuelto a la normalidad. De los nobles filtrados restantes, el 70 por ciento había decidido continuar haciendo sus trabajos anteriores, mientras que el resto quería probar suerte en el Ayuntamiento, a pesar de que el requisito básico para solicitar el examen de administración, "alfabetismode oraciones" era fácil para ellos. Roland aún creía que después de las pruebas finales, estas personas no tendrían muchas oportunidades de convertirse en miembros oficiales.
Después de todo, era difícil para los nobles cambiar sus hábitos.
Pero ciertamente, convertirse en un empleado normal era mucho mejor que perder la cabeza.
