Dentro de la Torre de Babel en la Catedral de Hermes.
El recién coronado Sumo Pontífice, Mayne, escuchaba en silencio los informes de los tres obispos en la sala secreta.
Aparte del anciano obispo Tayfun, los otros dos eran arzobispos recién ascendidos, Soli Darl y Ell, que provenían del Ejército y del Tribunal del Veredicto, respectivamente. El primero había sido un valiente y heroico juez presidente que había ganado una reputación estelar en el transcurso de más de 25 años de servicio en el ejército, y este último había sido el ayudante de Heather y también era muy respetado.
—El ingreso de huérfanos del Reino de Siempreinvierno ha sido muy exitoso durante los Meses de los Demonios de este año. Los nobles de cada ciudad importante se han rendido totalmente a la iglesia. En la actualidad, el número de huérfanos enviados a la Ciudad Santa ya es tres veces más de lo planeado —dijo Tayfun con un suspiro —. Esta es la única buena noticia recientemente.