Las representaciones teatrales fueron un gran éxito.
Durante dos semanas, realizaron 'Cenicienta' tres veces y muchas personas vinieron a verla más de una vez. Varios asistieron al estreno debido a su publicidad, mientras que las siguientes dos presentaciones tuvieron un aumento espontáneo en las multitudes. Incluso hubo gente que acudió al Ayuntamiento para preguntar sobre la próxima actuación.
Esto dejó a Roland muy alegre. Todo el mundo había quedado completamente fascinado por la historia. De hecho, casi no había nadie a quien gritar en objeción, por preguntarse cosas como: '¿Por qué una bruja ayuda a Cenicienta?'.
El próximo mes mostraría 'El gallo canta a la medianoche', una obra cuya audiencia se compone principalmente de sujetos pobres. No sabía qué pensarían los siervos acerca de las brujas que los ayudaban en el espectáculo.