—¡Todos ustedes deben saber que nuestra ciudad está siendo asediada! —Isabella aplaudió para atraer la atención de todos. —Pero el enemigo ya no está compuesto de simples bestias demoníacas, detrás de estos animales mutantes yace un enemigo no inferior a los demonios. Según fuentes confiables, sus asaltos solo se volverán más y más feroces, a una escala cada vez mayor, ¡hasta que nos aniquilen por completo!»
—Por supuesto, Nuncainvierno y el Primer Ejército nunca les permitirán entrometerse imprudentemente en el último bastión del territorio humano. Pero debo enfatizar que derribar enemigos visibles es fácil, pero los invisibles son los más peligrosos. Esto no es una exageración, sino la verdad… —En este punto, indicó a unos pocos soldados que apartaran un gran saco gris.
—¡Oh…!
Todos inhalaron al instante con sorpresa.
Balshan no fue una excepción.