—¡Levántate! Mientras trabajes diligentemente para la Facción Xuanxuan, te guiaré en tu destreza con la lanza —ordenó Zhang Xuan.
La Facción Xuanxuan acababa de ser establecida, y considerando que era una facción formada únicamente por novatos, necesitaba urgentemente un poder de combate legítimo. Sin embargo, Zhang Xuan no tenía tiempo para proteger a sus miembros cada vez que algo sucedía, así que necesitaba traer aprendices lo suficientemente poderosos para protegerse de los alborotadores.
Teniendo en cuenta que estos tres eran los genios de los estudiantes de cuarto grado, eran los candidatos más adecuados.
Esta era también la razón por la que Zhang Xuan les había provocado a aceptar la apuesta de convertirse en los guardianes de la Facción Xuanxuan.