—¿Vigilar tus puertas? —Ying Qin, Bai Mian y Yuan Gang apretaron fuertemente los puños después de escuchar esas palabras, casi explotando en el acto.
Eran estudiantes de 4º grado, expertos en la cumbre del reino de las Pisadas Etéreas. Sin embargo, un estudiante de primer año quería que vigilaran sus puertas.
¿Era esto siquiera una apuesta?
¡Esto fue claramente un intento de humillarlos!
—¿No estaban seguro de que no perderían hace un momento? Si no pierden, seguramente el contenido de la apuesta no les importará, ¿verdad? ¿Qué, ha disminuido su confianza? —Zhang Xuan miró al trío con una ligera sonrisa en los labios.
—¡Cambia las condiciones! —Con expresión de furia, Ying Qin se tiró de las mangas y gruñó.
Aunque no perderían, no podrían aceptar una apuesta así. ¡La otra parte claramente los menospreciaba!