Frotando su glabela, Zhang Xuan finalmente se despertó.
Había demasiada información contenida dentro de la Biblioteca del Camino al Cielo, causando que el tiempo en que permaneció desmayado durara mucho más que antes. Sin embargo, las recompensas que obtuvo también fueron masivas.
Técnicas de batalla, boticario, domador de bestias, pintor, médico, maestro superior, maestro del veneno...
La información de innumerables ocupaciones se había hecho suya. Ya no tenía que sumergirse en la Biblioteca del Camino al Cielo para buscar esta información; con un solo pensamiento, aparecería en su cabeza.