—Este es exactamente el aspecto sin miedo de Zhang shi que asombra a los demás. No importa lo inconcebible que sea una hazaña, es capaz de hacerla con perfecta facilidad usando métodos no convencionales —dijo Zhang Jiuxiao, cuyos ojos brillaban de admiración.
Como descendiente del Clan Zhang, había crecido oyendo hablar de la grandeza del "joven prodigio". Como resultado, había crecido admirando el talento del joven prodigio, pero en ese momento, no había nadie más a sus ojos que Zhang Xuan.
No importaba lo formidable que fuera el joven prodigio, todo se basaba en la pureza de su linaje. ¿Cómo podría compararse con Zhang Xuan?
Con tiempo suficiente, Zhang Jiuxiao no tenía ninguna duda de que Zhang Xuan sería capaz de superar al joven prodigio y alcanzar la cima del mundo.